Tu mirada salva
Por hoy cerremos el poema amargo basta con estar solo
Con la capota gris del cielo y la llovizna que altera
el ritmo
Basta con reclamos al escudo de todos estos años secos
Despojados en franco esqueleto. Basta de echar culpas
Apagarle luces al vecino poner galgos a acortar
distancias.
Nada vale más que tu mirada detenida en mi palabra
ella
Rescata nos echa a andar completos. Basta a los
reproches
Todo es lo que el amor consagra sin tasa se hunde el
resto:
Títulos propiedades preferencias y supremacías
cáscaras
De invierno ausente ya la simiente que el viento
exporta.
© Carlos Enrique Cartolano. De Plumas y susurros, 2012
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